Documental contemporáneo ficción y la manipulación de Mediación

Tuesday, February 23, 2016

La novela histórica seria está de vuelta. Después de una breve pausa durante gran parte de la década de 1980 y '90s- entre otros factores, parece minimalismo era simplemente incapaz de soportar la carga de la historia, la novela histórica de gran seriedad, que prosperó en los años 60 y 70 con la talla de Thomas Pynchon, John Barth, Robert Coover, Ishmael Reed, y E. L. Doctorow, ha vuelto. Una breve encuesta de los principales ganadores y finalistas de American Book Award en los últimos seis años lleva a cabo, al menos circunstancialmente, mi reclamo de apertura. Dos de los cinco finalistas para el National Book 2006 Premio, Mark Danielewski Sólo Revoluciones y Dana Spiotta Coma el documento, son novelas historicas. La cosecha de 2006 también incluyó dos post-9/11 novelas con graves histórica encallamiento.

Cuatro de los cinco finalistas en 2005 eran novelas históricas (Doctorow de la marcha, Christopher Sorrentino Trance, de René Steinke Santo faldas, y William Vollmann Europa Central). Los dos anteriores Libro galardonados (Noticias Nacional de Lily Meta De Paraguay en 2004 y Shirley Hazzard del gran incendio en 2003) también podrían ser considerados novelas históricas. Otros recientes finalistas históricos Premio Nacional del Libro incluyen Edward P. Jones es lo conocido Mundial (2003), el último informe de los Milagros en Little Sin Caballo (2001) de Louise Erdrich, y Rubia de Joyce Carol Oates (2000). de Doctorow La marcha también se ganó un lugar como finalista el premio Pulitzer 2006. Todos los tres finalistas para el Premio Pulitzer de 2005 (Guerra de la basura de Ha Jin, Ward, a sólo una temporada sin terminar, y Gilead del ganador Marilynne Robinson) son históricos novelas. El mundo conocido de Jones ganó el Pulitzer en 2004, y John Colson Whitehead de Henry Días (2002), Rubio de Oates (2001), y en espera de Jin (2000) han sido recientes 6 Pulitzer finalistas.

de Doctorow La marzo de 2005 obtuvo el premio National Book Critics Circle, y Gilead de Robinson ganó el mismo premio en 2004, un año que también contó con Philip Roth La conjura contra América como finalista. El mundo conocido de Jones ganó el premio en 2003 superando a El Tiempo de Richard Powers, de Nuestro Canto y Caryl Phillips de A Distant Shore, y Roscoe de William Kennedy era un libro finalista del Círculo de Críticos Nacional en 2002. Tengo incluido esta lista un tanto torpe de libros y premios a tierra mi afirmación de que la historia tiene nunca ha estado más presente en la escritura literaria de lo que es en este momento, pero aún más importante, para plantear la pregunta obvia: ¿Por qué nuestros mejores escritores contemporáneos obsesionarse con ¿historia? Mi objetivo es utilizar este estudio para examinar las posibles razones para el auge de la ficción histórica y la para investigar la importancia de la ficción documental contemporáneo para la cultura contemporánea como así como para el futuro de la ficción literaria.

 Al hacer esto, voy a analizar todos de los siguientes textos y argumentar a favor de su importancia literaria y cultural: Julia Alvarez En el tiempo de la Mariposas (1994), soñador de Charles Johnson (1998), Wolf silbido de Lewis Nordán (1993), Trance de Christopher Sorrentio (2005), Santa Faldas de René Steinke (2005), William Vollmann de El hielo para niños (1990), de Colson Whitehead John Henry Días (2001), y Mark Winegardner de Los Azules de Veracruz (1996). Sin embargo, antes de pasar a las razones para el reciente auge de este género, es necesario en primer lugar examinar brevemente la historia de la ficción histórica y su relación con historiografía adecuado y definir más estrictamente mi concepción de este vago y diversamente categoría definida. También es necesario, antes de proceder, para proporcionar una breve nota sobre la terminología. Mi proyecto se centra en lo que denomino la ficción documental contemporáneo. Tomo prestada la frase de Barbara Foley que define la ficción documental como la que busca la corroboración de extra-textual la creación de un mundo de ficción histórica. En resumen, se apropia de ficción documental real personajes históricos, documentos y eventos con fines de ficción. He optado por utilizar Foley "Ficción documental" en lugar de "el romance metahistóricas" de Amy Elias o Linda Hutcheon de frecuentemente citado "metaficción historiográfica" para varios reasons.

 En primer lugar, no deseo hacer hincapié en la la conexión entre la ficción contemporánea y sus genéricos raíces en el romance de Scott (como lo hace Elias); ni quiero poner de relieve los elementos posmodernos, meta-ficticias de las ficciones (una énfasis tanto en Elias y Hutcheon). Al igual que Foley, estoy interesado principalmente en las novelas que utilizar pruebas documentales extra-textual y las formas en que lo hacen. Además, "Ficción documental" conserva la paradoja esencial que, como sostiene Elias del título "El romance metahistóricas," permite múltiples formas de ver estos textos sin subordinar la ficción a la historia o viceversa ( "metahistóricas Pareja" 164). También distingo entre ficción documental y la designación más amplia "ficción histórica." Cuando me refiero a "histórica ficción "a lo largo de este estudio Pienso en la ficción que utiliza un sentido histórico-social en general, a diferencia de las figuras / situaciones históricas documentadas, para contextualizar y ordenar la construcción del mundo de ficción. En mi formulación, la categoría más amplia "ficción histórica" incluye como un subconjunto "ficción documental."

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